Más de seis meses habían pasado sin que el atletismo fuera protagonista en el Principado de Asturias. Medio año marcado por una pandemia en la que seguimos inmersos, pero con la paulatina vuelta a los entrenamientos, la ilusión se iba instalando. Después de un intenso tira y afloja, se aprobaron los protocolos que la Federación Asturiana de Atletismo mandó al Principado a principios del mes de julio. La fecha de la ansiada vuelta, el sábado 29 de agosto, siendo sede la pista de San Lázaro, Oviedo. Todo estaba preparado, pero la lluvia y el frío no se quisieron perder la cita, dejando una mañana propia de invierno, como si el tiempo no hubiera transcurrido desde marzo.
Más que resultados, hay que destacar el titánico esfuerzo de todos los atletas en general, demostrando que el título de llamarse atleta no entiende de edad ni categoría, pero aún así vamos a reseñar un par de actuaciones.
Laura López en categoría sub-20 logró la nueva mínima para el campeonato de España en 1500 con una gran marca de 4:46.9. Conviene recordar que el confinamiento llegó la misma semana en la que debería haber disputado el nacional de pista cubierta. Todo un premio e incluso revancha para la atleta de Carbayín.
El pasado sábado también se produjo la vuelta a las pistas, después de 30 años, del fenomenal velocista Luis Corzo. A sus recién cumplidos 47 años demostró que quién tuvo, retuvo, logrando una interesante marca de 13.36 en los 100 metros.
Desde el club queremos felicitar a todos nuestros atletas por su esfuerzo, compromiso y dedicación estos duros meses, así como su responsabilidad cumpliendo los protocolos de seguridad. No podemos bajar la guardia en ningún ámbito de la vida, pero para que podamos seguir compitiendo tenemos que ser inflexibles con las normas.
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